lunes, 28 de enero de 2013

PADRE NUESTRO (Por Cromañón) - La tremenda tragedia ocurrida en Brasil nos hace pensar en la de Cromañón

Padre Nuestro (Por Cromañón) Abro los ojos expectantes en el penúltimo amanecer. La mueca adormecida de mi boca gesticula incoherente los “por qué”. En la casi in-conciencia, los pasos del hastío se mueven, llevándome a buscar en la caja hiriente de la fantasía: mis labios rojos y el oscuro contorno de mis párpados. Los encimo y los mantengo en la increíble espera de un fantasma dubitable El péndulo invisible marca en el tic tac el vago transcurrir. ¡Se han roto mil cristales! El hollín de la desidia ennegrece blancas alas y calcinantes llamas las arrasan. En aterrado espanto, el humo que se levanta sobre Buenos Aires, dibuja infinitas fauces abiertas sobre la estática muchedumbre que mira azorada. (Perplejidad de almas) Ha pasado otro día. La almohada, aún inquieta, sostiene mi cabeza confundida y mis manos cargadas de ausencias se juntan implorantes. Muerdo un Padre Nuestro. Autora: Lucía Giaquinto